Veolia y Suez llegan a un acuerdo de fusión tras meses de desencuentros: opa de 20,5 euros por acción
Fumata blanca para la fusión de Veolia y Suez. Después de meses de confrontaciones, los grupos franceses de agua y gestión de residuos han llegado a un acuerdo para que Veolia lance una opa sobre Suez para la fusión de buena parte de sus actividades.
Según han explicado las dos empresas a través de un comunicado, la opa será de 20,5 euros por acción, es decir sustancialmente por encima de los 18 euros que había propuesto Veolia hasta ahora, y que era uno de los principales puntos de bloqueo. Por su parte, la dirección de Suez había puesto como condición un precio de 22 euros, en el que también ha cedido.
Según el esquema del acuerdo, la fusión dará lugar al «campeón mundial de la transformación ecológica» con una facturación anual de unos 37.000 millones de euros. Suez se quedará, por su parte, con un perímetro reducido de unos 7.000 millones de euros de volumen de negocios, y la actividad de agua y residuos sólidos en Francia, así como negocios de agua en Italia, República Checa, África, Asia central, India, China y Australia, así como actividades digitales y medioambientales en el mundo.
Ese «nuevo Suez» estará controlado por un grupo de accionistas, que tendrán que ser «mayoritariamente franceses», entre los que habrá «socios financieros» de ambos grupos y también los empleados.
Los accionistas tendrán que suscribir una serie de compromisos laborales por un periodo de cuatro años y también mantener sus posiciones en el capital «a largo plazo».
Veolia, por su parte, no solo reiteró las garantías sociales que había dado en su oferta inicial por un periodo de cuatro años para los trabajadores de Suez, sino que también integrará en los equipos de dirección centrales y en cada país a directivos del que hasta ahora era su principal competidor directo.
El acuerdo de principio presentado hoy deberá concretarse en un compromiso definitivo detallado «de aquí al 14 de mayo».
De entrada, se prevé que se dará marcha atrás en la venta de los activos de Suez en Australia a Cleanaway, así como «cualquier otra cesión significativa». Eso significa que Veolia se quedará con el conjunto de los activos de Suez que el pasado 8 de febrero había señalado como «estratégicos».
Además, se desactivará una fundación de derecho neerlandés que Suez había constituido para impedir ser absorbido por Veolia y se suspenderán todos los procedimientos judiciales en los que las empresas se habían enzarzado estos últimos meses.
En el origen de todo está la compra por Veolia, el pasado verano, del 29,9 % de Suez que tenía hasta entonces la compañía energética Engie y el anuncio a continuación de su intención de hacerse con el 70,1 % restante mediante una opa rápidamente considerada hostil.
El presidente del consejo de administración de Suez, Philippe Varin, consideró que el pacto anunciado este lunes «reconoce el valor» de su empresa y añadió que se mantendrán vigilantes a que se cumplen las condiciones para el acuerdo definitivo.
El consejero delegado de Veolia, Antoine Frérot, puso el acento en que el esquema de fusión concluido ahora «ofrece a Francia un actor de referencia en un sector que es probablemente el más importante de este siglo».
Frérot insistió en que se garantiza la continuidad de Suez en Francia, lo que permitirá mantener la competencia en ese mercado y se garantiza el empleo: «todas las partes implicadas de los dos grupos salen, por tanto, ganando. Ha terminado el tiempo del enfrentamiento, comienza el de la fusión.